LA
MOTIVACIÓN DEL PERSONAL HACIA LOS OBJETIVOS DE LA EMPRESA
La motivación del personal hacia los objetivos de la empresa es
fundamental para alcanzar el éxito. Cuando la plantilla trabaja
desmotivada, lo manifiesta de diferentes formas, una de ellas es que no
tiene deseos de concurrir a su lugar de trabajo, ya sea mediante el absentismo,
entrar "algo" tarde, continuas bajas, pérdidas de tiempo injustificas,...
En estas condiciones su rendimiento será deficiente, lo cual generará
más desmotivación dentro del equipo.
Los
recursos humanos son los activos más importantes de la Organización,
por lo que la motivación y la fidelización son fundamentales
para la misma. ¿Tomamos con frecuencia "la temperatura"
a la motivación de nuestros colaboradores? El espejo en que mejor
podemos verla reflejada es el clima laboral que se respira, su análisis
nos permitirá determinar si el liderazgo ejercido es el correcto
o no. Pero también debemos reflexionar sobre nosotros mismos, pues
el estímulo debe comenzar, sin lugar a dudas, en los niveles más
altos, dando ejemplo de motivación, profesionalidad y comportamiento
ético, por eso es bueno que realicemos con nosotros mismos una
autocrítica:
¿Tengo
ganas de ir a trabajar?
¿Comienzo
con alegría el día?
¿Me
dejo llevar por suposiciones no suficientemente fundadas?
¿Hago
acepción de personas?
¿Procuro
ser imparcial?
¿Cumplo
mis promesas?
¿Soy
lo suficientemente humilde para reconocer los errores?
...
(añada otras reflexiones)...
CÓMO
FOMENTAR LA MOTIVACIÓN DE SUS COLABORADORES
Cada individuo es único y el líder debe atender a cada individualidad
y el ambiente propicio para que emerja la motivación interior.
Con una adecuada motivación y como consecuencia de un buen
clima laboral se logrará aumentar la productividad. Todos
los líderes en este principio de siglo se enfrentan al reto de
motivar a los trabajadores para que obtengan los resultados deseados,
con eficacia, calidad, innovación, ética y responsabilidad
social, así como con su propia satisfacción y compromiso
personal. Son muchas las cosas que un directivo, si pretende liderar la
motivación de sus colaboradores, puede realizar para fomentarla:
Un
salario adecuado a la tarea que se realiza y en función de
la responsabilidad que se tiene. El dinero es un instrumento, pero
adquiere importancia como medio para la satisfacción de necesidades.
Generar
una Visión, una proyección temporal de la Organización
atrayente, retadora, con capacidad de ilusionar y estimular.
Una
correcta Planificación Estratégica, acorde a la Misión,
coherente y en la que se involucre al personal adecuado.
Apoyarse
más en la autoridad moral que en el poder formal.
Procurar
que los colaboradores dispongan los recursos que precisan sin que
estos tengan siempre que "estarse buscando la vida".
Dirigir
con inteligencia emocional, no teórica sino práctica.
Eso no se consigue participando en un seminario o leyendo un libro,
sino poniéndola en práctica de forma cotidiana.
Respetar
la dignidad personal y profesional de los colaboradores, tanto en
el fondo como en la forma.
Fomentar
la conciencia de producción bienes y/o servicios. Lograr que
la persona sea consciente de que origina una mercancía valiosa
y valorada, ya que la producción puede entenderse en sentido
económico o con un punto de vista más amplio relacionándolo
con las necesidades del ser humano.
Facilitar
el desarrollo humano y profesional de las personas. Siempre es bueno
y prudente rodearse de personas de valía que estén dispuestas
a mejorar, y es a estas a quienes, principalmente se debe facilitar
y proporcionar oportunidades de aprendizaje y de mejora de habilidades.
Fomentar
la autoestima. El hecho de trabajar se asocia en nuestra cultura y
tiempo histórico con una valoración positiva y el no
trabajar con una valoración negativa. Se censura a las personas
que no trabajan a menos que tengan fuertes razones para no hacerlo,
tales como edad, enfermedad,... La opinión que el individuo
tiene de sí mismo, es en muchos casos función del trabajo
que realiza, de la excelencia de su ejecución y de la forma
como reconozca la sociedad la importancia de esa labor que está
desempeñando.
Conseguir
compaginar vida familiar y laboral, respondiendo a cada necesidad
individual. Mostrar interés real y lograr una aproximación
entre las metas personales y las de la Organización.
Impulsar
el espíritu de equipo, estableciendo las condiciones en las
que las colaboraciones sucedan con facilidad y naturalidad. La camaradería
nacida del trabajo en equipo crea un sentido de comunidad para los
individuos involucrados, facilitando la comunicación y derribando
"muros".
Un
adecuado consumo de energía física y mental, evitando
la aparición del ocio, el aburrimiento y la rutina. Las personas
trabajan también para ejercitar sus músculos, su capacidad
verbal y/o sus habilidades intelectuales. La inactividad continuada
es más negativa y desagradable que el trabajo intenso.
Proporcionar
un enfoque de relación social, evitando el aislacionismo y
la introversión. Los individuos trabajan mejor cuando se sienten
bien con sus compañeros, con los mandos, los clientes y los
proveedores. El grupo de trabajo, que comienza siendo un medio para
un fin, se convierte con el paso del tiempo en un fin en sí
mismo; la persona va a trabajar también porque es importante
para ella estar en compañía de sus colegas, compartiendo
lo que hacen, disfrutando de su mismo estatus, teniendo sus mismos
intereses, actitudes y obligaciones. El trabajo tiene un carácter
social innegable, pues en la mayor parte de los casos se realiza en
presencia de otras personas.
Involucrar
a los trabajadores en la definición y resolución de
problemas, y en la toma de soluciones. El hombre busca sentido en
todo lo que hace, y esto se relaciona en forma compleja con la manera
de utilizar las energías vitales.
Es
importantísimo fomentar condiciones laborales atractivas que
retengan a los empleados más productivos. La alta rotación
tiene un coste gravoso para la Organización y es síntoma
evidente de que "algo no funciona".
Alentar
y estimular la creatividad y la innovación de las personas.
Permitir
la participación en la toma de decisiones. Alentar la participación
y la colaboración, construyendo los "puentes" necesarios para
ello.
Hacer
interesante el trabajo, enriquecer "ese puesto antipático"
por el que pasa tanta gente y que nadie quiere como propio.
Relacionar
parte de la retribución con el rendimiento. A mayores logros,
más beneficio individual. La motivación es un derivado
de la ambición y de la autoestima, el catalítico necesario
para que esta formula funcione es el incentivo. Todos trabajamos para
obtener un beneficio, normalmente tangible.
Proporcionar
recompensas, no necesariamente económicas, que sean valoradas,
cuando "se cumple más allá del deber" o en circunstancias
especiales. Evitar el agravio comparativo y crear una situación
de justicia y equidad, tanto en las tareas como en las recompensas.
Cada vez que un colaborador realice un esfuerzo extra en un proyecto
o en lograr alguna meta, reconozcamos el logro adecuadamente de una
manera única, diferenciada y notable. Es importante conseguir
que estas recompensas generen orgullo, entusiasmo y diversión.
Otorgar
confianza y responsabilidad a quienes la merecen.
Tratar
a los colaboradores como personas, no como "unidades de producción".
Tener
en cuenta el estatus social. El prestigio de un individuo es muchas
veces consecuencias de su ocupación. El prestigio de una profesión
es uno de los factores motivadores que atraen al individuo.
Involucrar
a los colaboradores en criterios éticos, de responsabilidad
social y medioambiental que estimulen su participación con
el entorno, creando un ambiente de confianza y respeto.
Tratar
a todos igual es un craso error, pues todos somos diferentes, y a
nadie le gusta sentirse tratado de forma "clónica", queremos
sentirnos únicos. Para ello hay que conocer y dedicar tiempo
al individuo.
Ofrecer
retroalimentación (feedback) de manera precisa y oportuna.
A nadie le gusta permanecer a oscuras con respecto a su propio desempeño.
De hecho un juicio de rendimiento negativo puede ser preferible a
ninguno, en esta situación una persona sabrá lo que
debe hacer para mejorar. La falta de retroalimentación suele
producir en el empleado una frustración que a menudo tiene
un efecto perjudicial en su rendimiento.
¿CÓMO
LOGRAR LA AUTOMOTIVACIÓN?
La motivación es resultado de la interacción del individuo
con la situación, es una combinación de procesos intelectuales,
fisiológicos y psicológicos que decide con qué vigor
se actúa y en qué dirección se encauza la energía.
Es un estado interno que excita, dirige y sostiene el comportamiento,
un sentimiento que determina el continuar o cesar una actividad. Sentirse
motivado significa identificarse con el fin y, por el contrario, sentirse
desmotivado representa la pérdida de interés y de significado
del objetivo o la imposibilidad de conseguirlo. ¿Cómo lograr
la automotivación?
El
ser humano busca el placer y evita el dolor. Conocer cuales
son las tareas con las que se disfruta y las vivencias que no se desea
experimentar, permitirá interpretar las actividades positivas
y establecer mecanismos de protección ante las negativas.
El ser humano necesita cierta medida de control.
Quien desee motivarse en el desempeño de una tarea, incrementará
los elementos de esa tarea que están bajo tu control, incrementando
su poder, su autoridad o su capacidad sobre esa cuestión. Evitará
siempre el caos, la burocracia y el desorden.
El
ser humano necesita sentir que contribuye. Es altamente estimulante
el identifica de qué manera lo que se hace tiene un impacto
positivo sobre otros.
La
motivación activa nuestra diligencia y, en definitiva, nos hace
trabajar más y mejor, disfrutando por ello. Así considerada,
la motivación es incuestionablemente deseable, y sólo falta
conseguir que el esfuerzo del individuo genere el mejor rendimiento. A
los directivos corresponde el asegurar que así sea: que no haya
"fugas" de energía. Cuando hay motivación suficiente, las
probabilidades de lograr con éxito lo que se pretende aumentan
de forma muy considerable. Las estrategias sobre dirección y desarrollo
del personal son el factor más importante que permitirá
contribuir al logro de los objetivos empresariales y al desarrollo personal
de los individuos.